Hoy 16 de agosto celebramos a San Arsacio de Nicomedia quien fuera un soldado persa al servicio de los ejércitos romanos.
San Arsacio de Nicomedia además fue el administrador de los bienes del emperador Licinio, y posteriormente se convirtió al cristianismo.
Por esta razón San Arsacio de Nicomedia sufrió mucho en la persecución ordenada por este emperador romano.
San Arsacio de Nicomedia se retiró como recluso en una torre en Nicomedia, donde se cuenta que realizó varios milagros, como el de haber lanzado a los demonios y muerto con su oración a un dragón.
San Arsacio de Nicomedia también predijo el temblor que acaeció en Nicomedia en el año 358.
Los sobrevivientes de este temblor se refugiaron en la torre donde el vivía, y fue cuando lo encontraron muerto en actitud de oración.
San Arsacio de Nicomedia murió el 16 de agosto de 358.
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