México siempre ha sido un paraíso para los amantes de los juegos de casino. Uno de los países con más turistas en toda Latinoamérica, reúne a millones de visitantes cada año en la Riviera Maya y Cancún, en donde la industria de casinos desarrolló la mayor parte de su actividad debido a este flujo de turistas que llena las playas durante todo el año.
Pero en los últimos tiempos, muchos casinos también se están instalando en la frontera con los Estados Unidos para atraer a aquellos residentes americanos que buscan cruzar la frontera incluso durante el día para aprovechar el entretenimiento del lado mexicano, en ciudades como Tijuana o Juárez.
El éxito de la industria de casinos en México se debe en gran parte al auge que están experimentando los juegos de apuestas en todo el mundo, con sus versiones en línea poniéndose al frente del entretenimiento digital y los casinos físicos construyéndose a una velocidad cada vez más grande por la demanda de este tipo de ocio por parte de los consumidores.
La ciudad de Las Vegas también contribuye al gran flujo de visitantes que buscan una experiencia de juego en México. La fama de la ciudad del pecado en Nevada atrajo a millones de personas que se hicieron aficionadas a los juegos de casino, y para muchos, en su búsqueda de nuevas experiencias en este sector, giran sus ojos hacia el vecino del sur de Las Vegas, ya sea de forma cercana en la frontera o llevando su experiencia aún más lejos y añadiendo el factor de las playas paradisíacas de nuestro Caribe.
Una de las grandes ventajas de la mayoría de casinos en México y que debes tomar en cuenta es que no cobran la entrada. Puedes incluso entrar como curioso y familiarizarte con las mesas de juego si es tu primera vez, y así agarrar confianza. De igual manera, no se exige un código de vestimenta, algo que es muy positivo sobre todo en casinos de ciudades playeras en donde no siempre uno lleva ropa elegante.
Para no llevarte malas sorpresas, recuerda que debes presentar tu identificación y tener al menos 21 años para realizar apuestas. Por regulaciones legislativas mexicanas, la industria de los casinos es una industria ‘cashless’. Esto significa que tendrás que adquirir una tarjeta prepago en el casino que te permitirá cargar dinero y acumular tus ganancias. Al final del día puedes recolectar los fondos de la tarjeta o volver otro día y seguir jugando con la misma.
En términos de juegos, todos los grandes casinos tienen las modalidades clásicas de póker, blackjack, ruleta o tragamonedas, siendo estos últimos uno de los favoritos entre usuarios, por su facilidad de uso y grado de entretenimiento.
Restando los tragamonedas, el resto se juegan en mesas con otros jugadores, por lo que si eres un jugador principiante esto puede resultar un poco intimidante las primeras veces, por lo que se aconseja que llegues al menos con alguna experiencia previa. Puedes practicar en plataformas de casinos en línea que te permitan entender las reglas de los juegos y adquirir técnicas de juego. Muchos casinos ofrecen cursos, pero quizás es mejor que aproveches tu tiempo en mesas reales y mejor optes por probar antes los juegos en algún casino online.
Una vez adquieras experiencia, podrás incluso probar eventos tales como torneos. En el caso del póker, los torneos en vivo pueden ser intimidantes, pero si sigues una serie de consejos podrás aplicarlos incluso para mesas de juego normales.
Es muy importante que en un casino seas muy observador. Observa a tus contrincantes, al final, en la mayoría de juegos compites contra ellos. Cada persona tiene diferentes estilos de juego y podrías aprender mucho de otras personas.
Y por sobre todas las cosas, ten mucha paciencia. No busques ganar grandes botes en las primeras rondas. La ansiedad puede jugarte en contra. Los juegos de apuestas se asemejan a una montaña rusa de emociones, unas veces pierdes y otras ganas. Es importante saber que nunca pasará que únicamente pierdas o que solo ganes. Tómate tu tiempo y recuerda disfrutar del momento.